Todo el boom del skincare no se trata de una búsqueda incesante de la belleza o de retrasar a como de lugar el paso del tiempo, se trata, más bien, de poder ayudar a nuestro rostro a estar sano, y con ello la belleza viene por añadidura.
En este contexto es que las mascarillas se han vuelto tendencia en todo sentido. Y es que hablar de mascarillas ya no es hablar de la palta molida en el rostro, hay un mercado muy amplio y específico en estos productos que hoy existen para distintas funciones como limpIeza, exfoliación, incluso aclarantes de rostro, pero… ¿una mascarilla que logre combinar todo esto en una sola aplicación?
Esa es la promesa que hace este producto de la firma Gumi Bears, se trata de la mascarilla exfoliante de arcilla rosa Beauty Pink Clay, la que promete desintoxicar nuestro cutis, purificando nuestra piel, liberándola de la suciedad y la contaminación. ¿Será posible tanta maravilla? La probé por un mes, y este es mi veredicto.
¿Qué es?
Beauty Pink Clay, es una mascarilla de arcilla rosa que contiene: Maqui, ingrediente que ayuda a retrasar el envejecimiento prematuro de nuestra piel; Granada, antioxidante natural; Murta, analgésico y estimulante de colágeno; y Cera de abejas, la cual hidrata y suaviza nuestra piel.
¿Cómo funciona?
Esta mascarilla exfoliante funciona igual que cualquier otra, se utiliza de 2 a 3 veces por semana, la diferencia es que esta posee propiedades despigmentantes, y se recomienda dejarla actuar durante la noche en las zonas manchadas- por lo que es ideal para quienes tienen manchas en la piel.
Debo confesar que es una mascarilla bastante llamativa a la vista, primero por su packaging, segundo, viene en una caja rosa con celeste y su envase es completamente rosado, ¡y el contenido también lo es! y tercero, posee un olor exquisito (dulce).
Por otra parte, es una mascarilla apta para todos los tipos de piel. Si eres como yo y tienes la piel mixta, será el mejor aliado en tu rutina de skincare porque ayuda a matificar la piel, pero no deja ese aspecto craquelado que se ve tan mal.
Debo confesar que los primeros usos, me ardió un poco la cara – si eres de piel muy sensible, no te recomiendo este producto-, al usarlo se siente fresco como si te hubieses puesto un poco de mentol en el rostro, pero fuera de eso, los resultados son notorios desde el primer uso.
En mi caso me ayudó a reducir visiblemente los poros, unificar el tono de mi piel, haciéndola lucir más sana, fresca, y con un efecto glow. Además redujo la aparición de espinillas y puntos negros.
Sin dudarlo es una mascarilla que recomendaría si tienes problemas de rojeces y acné, pero como les comenté, en los primeros usos podría sentirse un poco abrasiva. ¿Veredicto? Me gustó, y le di la bienvenida oficial a mi rutina al menos dos veces por semana.