11 de la mañana en Chile, es martes, pero es feriado. Las calles de Las Condes están vacías, y hay un tibio sol de invierno. Entro al lobby de un conocido hotel al que me citaron en Vitacura, y en primer plano, coronada con un jockey con cristales de una marca de lujo, aparece ella, lo más parecido a una princesa de la farándula chilena, vapuleada por los medios, pero amada por la gente, ¡hola! me dice mientras levanta a mano, ella es Nicole, la mujer tras Luli.

Nos habíamos conocido hace un tiempo en un evento, Nicole me lo recuerda. Debo confesar que -quizás- como todo chileno tenía mil prejuicios en torno a la rubia que popularizó internacionalmente la frase “Siempre fuerte, nunca infuerte”, pensé que no respondería, que se cuidaría, que no la “desempaquetaría”, me equivoqué.

Para analizar su vida tenemos que dividirla entre un antes y un después de su hijo, al que dio a luz teniendo solo 14 años, mientras cursaba primero medio. “Sabía que había riesgos cuando estaba pololeando, pero a pesar de ser tan joven, jamás pensé en no tenerlo”, nos cometa melancólica. Este hecho sin duda configura una vida diferente a sus compañeras de colegio, en ese momento la niña Nicole debió convertirse en adulta-

¿Cómo fue el primer tiempo siendo mamá?

¡Uf! dormía tres horas diarias, no daba más porque estaba estudiando, trabajando como catadora de crédito en una multitienda y siendo madre. No me daba el cuero y tuve que empezar a priorizar.

¿Dejar de trabajar no era una opción?

Siempre he sido de tomar decisiones, independiente, toda mi vida me la he jugado sola, soy ambiciosa, nunca me conformo con lo que tengo. Por lo tanto no, no era opción.

Ambiciosa con todo, ¿incluso con la fama?

No (ríe) que la fama quede ahí no más.

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MADRE ADOLESCENTE Y CON UN NOVIO DE 30 Y TANTOS.

Nicole se define (y se muestra) muy fuerte ante la adversidad, clara en sus ideas y también muy “llevada” a sus ideas. Quizás por eso cuando tenía 16 años apostó por una relación con un hombre de 30, al que conoció siendo su paciente, se trató de un odontólogo a Quine conoció en una visita de rutina.“De hecho después fui su asistente dental, él me enseñaba. Fue un gallo respetuoso, me apañaba en todo, responsable y fiel, independiente de los años de diferencia”, recuerda.

Él tenía 30, ¿Nadie cuestionaba la diferencia de edad?

No, después tuve un pololo pediatra que también era mayor que yo.

Y si tuvieras una hija de 16 años que quisiera pololear con alguien que la dobla en edad, ¿tendrías conflictos?

Depende del contexto, es compleja la pregunta, en lo personal lo vi como amor, era una relación sana. Si ella está enamorada la apoyaría, en el amor no hay edad y si lo conozco y si es una buena persona, no me molestaría.

Imagino que hubo etapas que saltaste, o procesos que no viviste…

Si, he trabajado a full toda mi vida, no he tenido la suerte que han tenido otras mujeres a las que les pagan todo o las ayudan mucho, a mí me encantaría pero mi historia fue diferente. Me encantaría que llegara un príncipe azul y me dijera “Tómate este año y estudia o viaja”.  Hubo ciertas etapas que no he logrado vivir porque he trabajado mucho, y en tv me cuestionaron y ridiculizaron mucho por eso, pero esta es mi vida, es lo que me ha tocado y lo he hecho todo lo bien que he podido.

¿COMER O COMPRAR ROPA?

A los 18 años, Nicole trabajaba en una multitienda, pero mientras ofrecía tarjetas de crédito siempre soñaba con ser modelo publicitaria. Por eso es que cuando una amiga le habló de la posibilidad de realizar un reemplazo bailando en tv, Nicole lo aceptó de inmediato. “A un productor le gustó mi trabajo, me dijo en un pasillo que quería llevarme al festival de Viña por 10 días y yo acepté, en ese momento renuncié a mi trabajo”.

Un sueño cumplido, llegar a la tv de un momento a otro, ¿no?

Si, me mandaron al solarium, a la peluquería, y yo estaba feliz, lo pasaba bien y claro estaba cumpliendo un sueño con 18 años.

¿Cómo fue esa semana en Viña?

(En este momento Nicole se pone seria, su rostro dibuja un recuerdo nolstálgico, sus ojos se tornan rojos y me comenta…)

Ya no me acordaba de esto, fue una etapa bonita, pero tan diferente… En Viña necesitaba ropa nueva todos los días para el programa, y yo no tenía tanta ropa nueva para cada día. Lo que hacia era gastar en ropa los $10.000 que me daba la producción cada día para comer, y lograba un look nuevo cada día con esa plata. ¡Me gastaba lo de la comida! me alimentaba solo del catering que había en el camarín.

Pero pasaste vestirte completa por $10.000 a comprar lo que quieres, te veo con varias marcas de lujo hoy…

(Ríe) Pero más allá de que hoy me pueda vestir con lujo, nunca he buscado vestirme cons marcas. Si veo algo en una tienda x, y me gusta, da lo mismo si es caro o barato, lo compro igual. En mi clóset hay de todo.

¿Qué vino después de esa semana bailando en Viña?

En ese momento vino la fama, ser reconocida. Estuve siendo invitada por 10 años a todos los programas, pero la TV no me tomaba muy en serio por haber partido con el personaje de rubia tonta.

Y si no lo hubieras hecho, ¿tu carrera sería distinta?

Siempre creí que trabajaría en este medio, pero claramente mi intención no era entrar con este personaje, fue la oportunidad que se dio en ese momento. Y claro, si no lo hubiera hecho hoy sería todo distinto, sería mejor. La gente no tendría el prejuicio que tienen sobre mí.

LA CRSISIS DE “CREDIBILIDAD”

Hablemos de Luli Love, nace en SQP y no en Mekano como todo el mundo cree, ¿no?

Si, hace en SQP en 2007, y era una notera tonta, irreverente, era un personaje, hablaba incoherencias, era jugada y osada, un poco sexy también, rompía barreras. Mi mamá no quería que saliera, que hiciera todo eso, pero lo hice.

¿Tu dijiste “esta es la oportunidad que tengo para entrar y la voy a ocupar”?

Sí, en mi corazón lo sentí así. Pero no todo fue bueno, luego apareció en vida gete que no debió aparecer jamás.

Pero lamentablemente la gente recuerda muchas polémicas tuyas… el episodio secuestro por ejemplo…

No quiero hablar de eso pero fue real, te lo juro por mi hijo. Mi pareja de ese entonces me agredió física y psicológicamente por dos años. Había sentimientos y costumbre, me sentía culpable de lo que él me hacía.

¿De qué te sentías culpable?

Él me maltrataba, me pegaba. El día del secuestro, me tuvo encerrada más de cinco horas contra mi voluntad, casi me mata. En un momento me intentó asfixiar y me amarró, esa fue la gota que rebalsó el vaso.

¿Dónde fue eso?

En mi departamento, y fue todo porque él había chocado su auto y quería que yo le pasara plata, como no lo hice, empezó el show. Me pidió disculpas y recaí, porque claro, siempre me decía que iba a cambiar. Me hacía sentir culpable, sentía que me lo merecía, me daba vergüenza contarlo, no sabía cómo lo iba a tomar mi familia, no tenía confianza, no tenía amigas para contarles, y sufrí un montón porque en la tele se cuestionó mucho todo.

¿Cómo se enteró la prensa?

Ese día tenía una entrevista con un diario y él me quitó el celular, al pasar las horas me lo devuelve y aviso que no me podré juntar con el periodista porque un chico me pegó, y entonces Julio Canale (ex pareja) me agarra y me dice: “¿Cómo se te ocurre decir eso?” Y cortó el teléfono. Me dijo: “¡dejaste la cagada! ¿Qué va a decir mi familia?, ¿mis amigos?” “Pero yo no dije tu nombre”, le dije. Después de eso, él creó toda la historia del secuestro para decirlo a la prensa, yo simplemente le seguí la historia. Yo no lo podía dejar, me costó un montón. Sentía que era el único hombre que podía existir y que yo no valía nada.

Y de ahí sales a dar declaraciones y dices que fue un secuestro

Si, y toda la historia fue para protegerlo a él. Yo lo defendí siempre, fui estúpida.

NICOLE, LA EMPRESARIA

Mucho se ha criticado a Nicole a través de los medios, se le ha acusado de protagonizar “tongos”, o de estar siempre envuelta en polémicas. Pero como mujer de esfuerzo que es, durante 10 años en tv ha sabido capitalizar sus momentos de fama, tanto así que hoy goza de una situación muy estable -y envidiable, quizás- pero advierte que todo ha sido fruto del trabajo, que muchas veces quisiera estar acostada en su cama, pero debe estar en alguna ciudad animando un evento.

¿Cuál fue el primer lujo que te diste con los sueldos televisivos?

A los seis meses cambié mi auto rosado a una camioneta, por ejemplo. Pero en realidad creo que siempre me preocupé más de mi familia. Estando bien mi familia, estoy bien yo, de lo contrario no podría vivir.

Debe ser desgastante…

Si, por eso hace dos años decidí dejarlos volar, tenía que aprender cómo es la vida, me costó tomar esa decisión aunque ellos entendieron perfectamente. Fui muy protectora, yo les di lo que quería darles, ellos nunca me pidieron nada, pero es como la historia de los futbolistas, y creo que todo hijo lo haría. Ahora necesito estar concentrada en mi hijo y en mí, toda mi vida me dejé estar, me preocupaba solo de los demás, y ahí también dejé la TV.

¿Fue tu decisión?

Si, sola, quería vivir mi vida tranquila, no quería estar tan expuesta, tenía ahorros, quería estar con mi hijo. Pero en los momentos en que más estuve con él, pasaron cosas que ni me explico, hace tres años y medio dejé todo. Yo dejé la tele, la tele no me dejo a mí.

Ahí empieza el negocio inmobiliario, ¿eso es tu fuente de ingresos?

No al 100%. Tengo cinco y estoy viendo algunos otros. Pero siempre me he dedicado más a las comunicaciones, aunque fue muy bueno un tiempo de break. Ahora estoy más tranquila, pero en el fondo amo trabajar.

¿Es cansador tener un trabajo irregular?

Sí. Siempre he pensado que los independientes trabajamos más que los dependientes, y es un riesgo, pero obviamente tenemos otras ventajas, pero te las tienes que rebuscar, si uno trabaja genera, y si no, no.

¿Hoy estamos frente a una nueva Nicole Moreno?

Sí, y en todo sentido. Estoy más aterrizada, le tomo más valor a las cosas, a todo, a los segundos, a la familia y al trabajo.

¿La nueva Luli tiene contrato o proyectos en TV?

Estoy animando un programa en Vive TV. Pero lo veo también como un negocio porque es una producción mía junto a un socio.

UNA NUEVA LULI

Hoy Nicole recuerda su corona como reina del festival de Viña como uno de los mejores momentos de su vida, pues coincide con todo un proceso de “detox de la tv”, en que intentó alejarse de la farándula. “Haber sido Reina de Viña del Mar fue algo que siempre quise, con eso cumplí todas mis metas en televisión, claramente ahora tengo otros propósitos.  En ese momento fue muy emocionante y conmovedor”, recuerda.

Eso te puso en la categoría de Catherine Fulop  y de Tonka…

Claro, y de  Celia Cruz, Natalia Oreiro (ríe).

¿Qué vino después de eso?

Después de eso viajé, vinieron varias portadas de revistas, más contratos haciendo lo que me gusta.

Con 14 años de “carrete televisivo” hubo varios momentos duros, ¿qué recuerdas con más dolor?

El momento más duro fue cuando sufrí violencia y lo que ocurrió ahora con mi hijo, esos han sido los momentos en que más lo he pasado mal.

UNA MADRE PRESENTE Y CASTIGADORA

Del tema de tu hijo conocimos la parte mediática, ¿podríamos hablar de la parte intima?

Nunca he respondido nada. Me han invitado a tres o cuatro programas para hablar de esto mismo y no he querido, nunca voy a hablar respecto a este tema, no voy a hablar de lo que sucedió pero si me preguntas sobre la crianza y la TV,  la verdad es que me considero una de las mamás más presente, jugada, comprometida, y preocupada.

¿Qué edad tiene tu hijo?

Tiene 16 y jamás lo he dejado de lado. Trabajo como cualquier mamá que necesita y tiene que hacerlo. Si yo no hago un evento, si no voy a animar o a algún programa de TV, claramente no vivo, tengo que trabajar para que él esté bien.

¿Te cuestionaste en algún momento, pensaste que quizás lo descuidaste o quizás le diste muchas cosas?

La adolescencia de hoy es muy distinta a la de 10 años atrás. Todos cuando chicos nos podemos equivocar, en mayor o menor grado, pero para mí, mi hijo es un niño que está en pleno crecimiento, no lo voy a justificar pero sí siempre voy a estar ahí como madre, apoyándolo y entregándole lo mejor. Me quedo tranquila porque solo yo sé como he sido y soy como madre, no necesito subir una foto a Instagram para que la gente se dé cuenta. Él ahora va a retomar sus estudios, está haciendo deporte, volvió su vida normal.

¿Él sabe que se equivocó?

Sí.

¿Eres una mamá castigadora?

Sí, al 100%.

¿Qué pasa con su papá?

No hablo de personas que no están presentes.

Y hoy estás en pareja… Hace poco en los medios conocimos el nombre de Juan Pablo, ¿qué e puedes contar de él?

¡Nada! (ríe) en realidad solo puedo decirte eu estoy  viviendo una etapa muy feliz.

TIEMPOS DE CRISIS EN VIVO Y EN DIRECTO

Nicole se sabe una mujer polémica, en parte por eso la conocemos. Pero hoy prefiere alejarse de eso y se siente más sana emocionalmente.

Protagonizaste un video muy viral con una crisis de pánico en un avión, ¿eso fue real?

Sí, en el vuelo me dio una crisis de pánico, había viajado con mi ex, y él se vino antes, yo me quedé tres días allá, sucedieron cosas que no correspondían y en ese momento explote en el avión, viví un viaje muy tormentoso.

Estuviste hospitalizada

Prefiero no hablar de eso, pero fue por estrés.

Una de tus frases más polémicas fue cuando comparaste que te dijeran “gorda” con que te insulten con tu madre…

Era chica. Tenía un problema hormonal muy fuerte  y por eso estaba así, me lo tome de esa manera.

De ahí vino un tiempo que te siguieron molestando porque ante los medios te volviste un poco anoréxica…

Bajé mucho de peso porque empecé a cuidar lo que comía, me di cuenta que comiendo sano tenía mejor humor, no estaba tan estresada y mi piel cambio porque antes tenía acné, y se me quito todo. Nunca tuve anorexia, pero empatizo mucho con la gente que lo sufre.

¿Cómo estas emocionalmente?

Súper bien, estoy más tranquila y madura, se lo que quiero y a dónde voy.

¿Y a dónde vas?

Es el momento de Nicole Moreno, quiero que salga en todo su esplendor, me veo siendo una gran comunicadora, siendo un aporte a la TV.

¿Te toman en serio en la TV?

Cuando yo quiero, sí, y cuando no quiero, no. (Ríe)

¿De donde viene tu inestabilidad emocional que sufriste en algún momento?

Creo que toda la gente que trabaja en TV y está expuesta al mismo nivel que estuve yo, con criticas constantes, finalmente se sienten afectadas. Creo que ahora recién con el fenómeno de las redes sociales, alguien podría entender todo lo que a mi me pasó, lo que sufrí lo expuesta que estuve.

En redes sociales uno recibe bullying  de personas desconocidas, pero tú recibías bullying de rostros de TV…

A veces lo encontraba injusto, sobre todo cuando inventaban cosas, de todo lo que se habló, yo creo que el 60% fue mentira, inventaron bastantes cosas, pero tampoco me hago la víctima, yo entré en ese juego y esto es sin llorar.

¿Y de verdad es sin llorar?

No, no siempre. Como soy tan sensible y tan de piel, obviamente me afectó y pasó la cuenta. Soy muy emocional, pero hoy no me lo permito, ahora soy más fuerte.

¿Siempre fuerte, nunca infuerte?

Siempre fuerte, jamás infuerte (ríe).

Entrevista: @ahorapinto

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