Tras solo una edición el 2023, el Andes Fashion Week ha llamado la atención internacionalmente. ¿La apuesta? no solo se trata de una pasarela internacional, se compone además de una conferencia de moda y negocios. ¿La mente creadora? una diseñadora venezolana que con 10 años viviendo en Chile detectó varias necesidades en nuestra industria local, ¿la solución? creó un fashion week desde el fin del mundo, para todo el mundo. 

Ella es Leticia Faviani, una diseñadora que tras presentarse el 2018 en un fashion week local, se encontró con una lastimosa realidad: no había otros eventos similares donde presentar su más reciente colección. En ese momento creó Andes Fashion Week, un evento que reunía todo lo que ella como diseñadora de modas consideraba necesario en un evento así: espacio para el diseño, vinculación con empresas, ruedas de negocios, mucha prensa y todo en un contexto de evento de lujo. 

SEGUNDO AÑO, NUEVOS DESAFÍOS

Tras su primera edición el 2023, el Andes Fashion Week está viviendo esta semana su segunda versión, que como novedad tiene el que no se realizará solo una vez, pues al evento actual, se le suma una segunda gran pasarela en noviembre, sobre los desafíos del que se ha convertido en uno de los principales eventos de moda del país, hablamos con su creadora, Leticia Faviani.

Los grandes fashion week del mundo significan siempre una aceleración económica muy fuerte para las ciudades sede, imagino que este también es un motor al crear Andes Fashion Week, ¿verdad?

Exactamente, AFW tiene como slogan “Moda, arte y relacionamiento”. No es un fashion week como todos los otros, es un evento premium con formato fashion week que tiene la moda como protagonista y conecta personas, empresas e historias que necesitaban coincidir, y eso no tiene solo una lectura de cultura, sino también comercial.

Ha crecido mucho desde el año pasado…

Si, el año pasado fue un día de pasarela, ahora tenemos dos, en noviembre serán tres, y así no voy a parar hasta que sean 7. Es un evento que genera empleos, que le da un espacio al diseñador local y al de Los Andes. La moda termina siendo la excusa perfecta y orgánica para reunir personas que necesitaban encontrarse, y este evento le brinda un espacio a empresas de productos y servicios que quizás no van a vender sus cosas en la pasarela, pero sí a partir de ello.

La moda es un encuentro para diferentes mundos…

Exacto, es tan potente que reúne a personas de distintos gustos, de distintas culturas, de distintos idiomas, no necesita ni siquiera ser traducida. Para mi como empresaria y como diseñadora, la moda termina siendo la herramienta perfecta que toda persona tiene a su favor. 

Los fashion week siempre se piensan en una ciudad como Milán o Paris, tú lo llamaste “Andes”, y me imagino que eso tiene que ver con ser venezolana y tener una visión más continental, ¿no?

Chile es un mercado bastante duro, y no lo digo yo, sino diferentes analistas comerciales. Es un mercado bastante conversador, hermético y geográficamente está muy apartado del resto de latinoamérica. Y tu lectura tiene toda la razón, Andes se llama así porque si hay algo en este país que me enamora es la cordillera nevada, yo lo veo y sé que detrás de esas montañas está el lugar de donde vengo. Y la verdad es que AFW reúne no solo el talento chileno que necesitaba mostrarse, sino también conecta con el talento que hay en la cordillera de los andes.

¿Ha avanzado el mercado de la moda en Chile los últimos años?

Yo siento que Chile ha evolucionado en el tiempo con la moda, tiene todas las condiciones y no solo de infraestructura económica y de espacios para recibir a distintos diseñadores de talla mundial. Estamos en el sur del mundo, pero el diseño chileno recorre el mundo y nosotros acá no nos damos cuenta, vivimos anhelando las grandes marcas europeas o gringas, y hay  chilenos en la gran manzana vendiendo piezas a más de 1500 dólares y acá no queremos pagar ni 70 lucas por esa prenda que ese artista está exportando y que lo están valorando en otro lugar del mundo. Creo que el desafío es enterarnos del valor que tiene nuestra propia creatividad. 

En esta edición del Andes Fashion Week, además de dirigir, lanzas una colección propia, ¿cómo se siente este doble rol?

Si, mi marca de diseño estuvo detenida por año y medio mientras echaba a andar Andes, que era como mi bebé, y necesitaba estar con él, y esto al mismo tiempo me frustraba, porque AFW yo lo creé para satisfacer mi propia necesidad como diseñadora. Pasé 5 años con una maleta saliendo de Chile para tener Fashion Weeks donde presentarme. Me presenté en el de Santiago el 2018 y después quedé sin lugar donde presentar, pasé 5 años recorriendo otros sitios, entonces creé el proyecto para resolver mi necesidad y la de mis colegas, y cuando creo AFW, resulta que la dueña del proyecto, no se presenta, entonces me organicé, dije “en esta edición no me puede pasar”, y ahora estoy muy ilusionada con mi colección RenaSer, que hace alusión a ese tiempo en pausa, y es una colección hecha con materiales nobles, está trabajada con alpaca del Perú.

Háblame del AFW 2024…

Iniciamos el lunes con una rueda de prensa y desfile de Lupe Gajardo, martes y miércoles tenemos pasarela, la que dividimos en dos bloques para que no sean desfiles tan largos, y estos dos bloques alojan estelares nacionales e internacionales. Desde Chile tendremos en pasarela a Bad Sisters, Lupe Gajardo, Jo & Fire, también hay diseñadores de países invitados, por ejemplo viene una diseñadora argelina, mexicanos, y varios emergentes de Argentina, Venezuela, Chile, desde distintos lugares para mostrar lo mejor de la moda. #SARAH