Hasta hace dos años, antes de tener la exorbitante cifra de un millón de seguidores en Instagram, Tati Fernández (16) era una niña que vivía en el campo y bailaba en su pieza para pasar el tiempo. Durante los veranos compartía junto a toda su familia en Puchuncaví, jugando como cualquier chica de su edad. “Vivo en un pueblo súper chiquito que se llama Campiche y cuando pequeña fui criada por mi abuelita porque mis papás trabajaban. Fue una infancia súper linda”, recuerda con una sonrisa que ilumina todo el lugar. Si, es verdad, su personalidad es completamente a-ma-ble (y no hablo de la amabilidad, que también tiene, hablo de esa mezcla de elementos que simplemente hacen que quien la conoce, la amé).
DANCING QUEEN
Cuando se enteró del casting de Rojo de TVN, no lo pensó mucho: “Sentí que iba a ser entretenido. Antes estuve en Mucho Gusto y pensé que sería parecido”. Tati nació en 2003 y no conocía el programa en su versión original (esa que usted y yo recordamos con la Mauda, la Yamna y la Jime Pereyra), así es que investigó al respecto y preguntó a sus padres, pero no fue hasta que se enfrentó ante una multitud de participantes que supo en lo que se estaba metiendo. “Había chicos profesionales, pero al presentarme me sentí cómoda. Cuando nombraron a los seleccionados me confirmaron que era la más pequeña”. Justo ahí partieron las comparaciones con María José Quintanilla y Christell, perdón si le recuerdo que ya tenemos un par de “años de circo”.
Pero convivir con personas mayores la ayudó a madurar: “Los chiquillos son como mis hermanos, nos llevamos bien. Rojo siempre va a ser lo más importante que me pudo pasar y lo que me llevó a estar en el mundo en el que estoy ahora”.
¿Cuándo te comenzó a gustar el baile?
Eso es algo que explico en mi libro “Ilusiónate, ríe, baila”. Porque cuando era niña hice gimnasia rítmica antes de darme cuenta de que lo que me apasionaba era el baile.
Pero ahora lo estás profesionalizando, ¿no?
Sí, estoy tomando “clases sueltas” como se dice. En Santiago en Elite Dance Center y en Viña, en la academia de los Power Peralta.
¿Te gustaría estudiarlo de forma profesional?
Quería estudiar la carrera de Danza, pero ahora me gustaría ser una artista integral: estudiar un poco de actuación y canto para hacer musicales; y locución para algún día animar un programa, ese también es mi sueño.
¿Qué tan importante fue para ti estar en Rojo?
Siempre voy a estar agradecida de TVN y de todo el equipo. Ellos confiaron en mí aunque fuera la más chiquitita, me han enseñado muchas cosas. Gracias a Rojo la gente me conoció.
¿Cómo fue ser parte del video “Pa’ la cámara” de Power Peralta?
¡Ohhhh, el video! Me invitó a participar la coreógrafa Dani Martínez. El día de la grabación éramos 100 personas y estuvimos hasta las 4 de la mañana. Tuve una parte sola y no lo podía creer. Al ver el resultado quedé en shock, es un video tan bonito que va a quedar para siempre.
¿Cuál es tu estilo favorito para bailar?
El dembow, tipo El Alfa y Myke Towers. Me gusta mucho ese ritmo, hace que yo baile sola.
Pero bailar tiene exigencias, la comida por ejemplo, ¿tienes una dieta especial?
Soy muy mañosa, no como carne desde los tres años porque descubrí de dónde venía. Podría ser vegana, pero no me preocupo mucho de los ingredientes. Solo me gustan las legumbres, arroz, fideos, puré y lechuga ¡soy extrema! Pero me hago exámenes y estoy súper bien. Como bailo, tomo aminoácidos en juguito para tener más energía.
ÉXITO DE VENTAS
Tati lanzó su primer libro titulado “Ilusiónate, ríe, baila” el pasado 28 de febrero, y a los pocos días ya era número uno en ventas a nivel nacional. Un éxito rotundo que la tiene impactada y feliz, ya que además “fue todo un proceso concretar las ideas de mi cabecita”, le cuenta a Revista Sarah.
Cuéntame un poco del libro…
Comienza con el casting de Rojo y de cómo voy recordando todo lo que pasé para llegar ahí: cambiarme de colegio, ser la compañera nueva, que me molestaran por cosas insignificantes y meterme a gimnasia rítmica para encajar a pesar de que siempre bailé, pero solo lo sabía mi familia.
Hay un mensaje power en el libro y en todo lo que haces…
Si, que nadie te puede decir lo que tienes que hacer, debes seguir tus sueños, no hacer lo que los demás hacen sino lo que a ti te gusta, potenciar tu talento y llegar lejos. Y ¡ojo! también fomentar la lectura.
¿Cuánto te demoraste en escribirlo?
El proceso fue bien largo, empezamos en mayo y terminamos en diciembre del año pasado. Yo iba mandando avances por capítulo a la editorial. Ellos me dijeron que podía dar una entrevista y escribirían el libro a partir de eso, pero yo dije que no. Quería que fuera 100% mío, y así fue.
Tu libro tiene pinta de saga, ¿viene otro?
El final del libro tiene un continuará. Están planificados dos libros, aunque no me han confirmado nada. Pero sería bacán, siento que aún me queda historia por contar.
THE INFLUENCER GIRL
Cuando Tati entró a Rojo tenía 1.300 seguidores en Instagram y al salir habían subido a 40 mil. Luego comenzó a trabajar en el área digital del programa, donde permanece hasta el día de hoy como encargada de las redes sociales y de las transmisiones en vivo. Ahora tiene un millón de seguidores en Instagram y, lea bien…., ¡cuatro millones en en Tik Tok!
¿Cómo lo haces para responder los mensajes de tus seguidores?
Siempre trato de responder lo más que puedo aunque es súper difícil. Las personas son las que hacen que yo crezca y una linda forma de agradecerles es estar comunicados.
¿Cómo fue llegar al millón de seguidores en Instagram?
Fue muy rápido (ríe). Me iba a Milán el día que llegué al millón y yo quería hacer algo especial para agradecerles, pero no me di cuenta cuando pasó. Así es que subimos al piso más alto de TVN y sacamos una foto súper espontánea. Estoy muy agradecida de mi familia virtual, no me importa la cantidad de seguidores o los likes, me importa que lo que haga inspire a la gente.
¿Qué significa para ti ser influencer?
Siempre me voy a considerar bailarina y por casualidades de la vida influencer y tiktoker. Mi onda en RR.SS es muy sana, siento que he hecho las cosas bien y voy a seguir subiendo lo que me gusta. Yo soy así, no voy a fingir porque uno puede tener una influencia súper grande en estas plataformas.
Es decir, ¿sientes responsabilidad por ser una figura pública?
Sí, estoy consciente de mi responsabilidad, siempre trato de ser cuidadosa.
Hace un tiempo hiciste un video en Tik Tok usando la canción de Las Tesis que fue un poco polémico, ¿cómo viviste esa situación?
Ese video se lo vi a otra persona, ella dijo: hagamos que la manifestación llegue a Tik Tok. El tipo de baile que hice es distinto al de las marchas y creí que era una buena idea, pero el problema fue que no escribí lo mismo que la otra persona. Mi intensión no fue faltarle el respeto a nadie, pero no lo supe explicar bien, fue un error.
¿Te gustaría involucrarte más en política?
Sí, cuando fue el estallido social veía las historias de mis seguidores y muchos estaban asustados, entonces comencé a dar información para que estuvieran tranquilos. También me gusta el medio ambiente y apoyar campañas de adopción de perritos de la calle, tengo cuatro: Toby, Pancha, Lucas y Billy. Cuando crezca me encantaría involucrarme más.
AMOR EN TIEMPOS DE TATI
Aun con una agenda tan copada, Tati se da el tiempo de descansar: “Soy muy hiperactiva, no me gusta estar en mi casa tirada. Hay días en que tengo mil cosas que hacer y me encanta, pero siempre dejo el fin de semana para mí”. Reconoce que le gustaría vivir en Santiago porque el viaje desde Puchuncaví le quita mucho tiempo. “Afortunadamente he generado ingresos, así que estoy juntado plata para comprar un departamento cuando cumpla 18. Además, en Santiago no solo tengo mi trabajo, sino también a mi pololo”, el actor Oliver Borner.
¿Cómo lo conociste?
En la Teletón del 2018, simplemente nos saludamos y luego, como estaba haciendo las transmisiones de Rojo, lo entrevisté. Nos seguíamos en Instagram y con el tiempo empezamos a hablar, nos dimos cuenta de que teníamos muchas cosas en común. Un día nos juntamos a ver una película y fue ahí que mis ojitos se flecharon (ríe).
¿Cuándo comenzaron a pololear?
Cuando volvió de un viaje a Estados Unidos, me dijo que me quería pedir pololeo en una fecha especial. Hizo una fiesta de Halloween y yo nací el primero de noviembre, entonces en la media noche cuando me cantaron el cumpleaños, él llegó con un ramo de rosas y con un globito que aún tengo que decía: “Tati, ¿quieres pololear conmigo?”; y ahí cuando nos abrazamos me dijo esa era la fecha especial.
¡Qué tierno! En redes sociales parecen pareja de cuentos… muy unidos.
Sí, somos mejores amigos, nos contamos todo, nos apoyamos y reímos todo el día. Estoy súper feliz con él.
INTERNACIONAL
¿Cómo fue ir al Fashion Week en Milán?
Cuando me llega la invitación de Dolce & Gabbana no lo podía creer. Fue una experiencia súper bonita, me acompañó mi mamá, grabamos contenido, vimos toda la colección y ¡viajamos en primera clase!
¿Es verdad que estás en conversaciones con Disney?
Fue verdad, pero no se dio, porque con el estallido social se pararon muchas cosas. Habían escogido a varios chilenos para audicionar, pero no sabía de qué se trataba exactamente.
¿Es un sueño para ti?
Sí, me gustaría, pero reconozco que me tengo que preparar, Disney es actuar, cantar y bailar. Ahora que pasé a tercero medio voy a tomar electivos artísticos y buscaré cursos. Mi pololo también me ha enseñado mucho, me dice que tengo cara de actriz porque soy muy expresiva (ríe).
¿Cómo te gustaría terminar este año?
Con la segunda parte del libro lista, enfocada en mi canal de YouTube, Tik Tok e Instagram; y seguir trabajando en Rojo. Pretendo perfeccionarme en las comunicaciones y aprender lo más que pueda. Ojalá tenga la oportunidad de animar algo y hacer un musical. Tengo muuuuchos planes (ríe).
Fotografía: @_sebastianandre_
Outfits & Styling: @bad_sisters
Calzado @cmoran
MUA: @pupi.beauty
Joyas: @swarovski
Hairstyle: @barbara_peloquera
Dirección de arte: @luisynilo
Asistente de producción: @corazon.invernal